Un
regalo especial… en un día triste.
Recuerdo que me la regalaron en el día de mi cumpleaños, fue
un cumpleaños triste, el primero después de que faltara mi madre, aún todo era
demasiado difícil para mí, pero la vida debía continuar sin ella… y con el enorme
vacío que dejó. Recuerdo que no quería celebrarlo pero me convencieron. De
entre los regalitos que aquél día recibí, estaba esta preciosa cajita-joyero que
me ¡encanto! con aquellas formas y colores dentro de un circulo que llamaron mi
curiosidad. Luego terminaría sabiendo
que aquel dibujo tan bonito tenía un nombre Mandala
y toda una interesante historia detrás, la cual descubría poco a poco.
Los
Mandalas han ido introduciéndose y adquiriendo un sentido especial en mi vida
poco a poco. Todo comenzaría con esta pequeña cajita-joyero, que como ya he dicho… fue la
primera figura con todas las características de un mandala que apreció en mi
vida por causalidad. Creo que la vida me quitaba algo muy importante para mí,
pero a la vez me daba una pequeña herramienta para encontrar un poco la
fortaleza y amor que residían en mi
interior y que yo ignoraba, y así poder afrontar aquella nueva etapa y aquel
enorme vacío.
Entonces todavía no sabía todo lo que aportarían a mi vida el hecho de conocerlos, el pintarlos, y crearlos, pero sobre todo,
dejar que formasen parte de mí día a
día. Pero… lo más bonito de aquello sería ir descubriéndolo con el paso del tiempo….
Imagino que a mí, como
a muchas personas más, les habrá pasado eso que dicen… que cuanto más fijas tu atención en algo, ese
algo se hace más presente en tu vida como por arte de magia. Así fue como comenzaron a llegar todo tipo de
dibujos de mandalas que hacían mayor mi
curiosidad.
Hasta que decidí comenzar a dibujarlos en mis libretas paso
un tiempo. Aunque me encantaban yo soy así, me cuesta decidirme hacer cosas nuevas. Pero en este caso tenía un pequeño
problemilla añadido al miedo de comenzar con algo nuevo. Y era que, a
mano me
costaba un poco hacer simétricas las figuras y los círculos, después de
mucho buscar encontré un programa muy
bonito con el que pude diseñar, crear y pintar todo tipo de mandalas.
Era
muy curioso, se me pasaba el tiempo volando cuando me ponía a crear un mandala,
era como entrar en una especie de sueño o trance en el que no existía el tiempo. Hubo un tiempo
en el que cada vez que tenía un ratito me ponía a dibujar, tanto así, que si más
dibujaba más quería seguir dibujando llego a ser adictivo, aunque ahora si lo
pienso mejor debía estar muy mal yo . Llegue a darme cuenta que, en los días
que me encontraba nerviosa por alguna razón, sin saber porque sentía la
necesidad de dibujar mandalas, era muy excitante me centraba tanto en crear los
dibujos que me olvidaba de todo. Es más
cuando terminaba, el problema no parecía el mismo y la sensación de mal estar
había desaparecido.
Con
el tiempo comencé a leer sobre los
mandalas sus beneficios y todo lo que significaban y aportaban el hecho de trabajar con
ellos. Al principio me costaba creer que el simple hecho de realizar o pintar un
dibujo podía conectarte con una parte de ti que ni tú misma sabias que existía,
aunque ya había experimentado lo bien que me sentía después de quedarme inmersa
en uno de los dibujos, aquello era más difícil de creer.
Aunque no os lo creáis, me costó varios años reconocer todo aquello. A través de mis dibujos, con el tiempo pude experimentar que cuando
dibujaba era como viajar a otro lugar de mi interior en el que me encontraba con
otra yo que me ayudaba a despertar y poder trasmitir a través de ellos toda aquella creatividad, dulzura y amor que
desconocía que vivían en algún lugar de mi misma.
En aquel tiempo creé una serie de 39 mandalas y fue
muy curioso, porque cada vez que comenzaba uno no sabía cómo terminaría siendo.
Pero recuerdo que siempre los iniciaba del interior al exterior, y comenzara
con la figura que comenzara, siempre al acabarlo curiosamente terminaba teniendo aspecto de
flor.
Los imprimí y encuaderné, sentí la necesidad de ponerles un nombre…“Flores de Paz,
Gracia y Compasión” Flores de paz
sobre todo porque sentía paz cuando los creaba,
gracia y compasión porque al observarlos
me trasmitían ese tipo de sentimientos.
Después estos mandalas han formado parte de mí en casi
todo lo que he ido creando, pero sobre todo en mis manualidades, aún no los he
integrado en el diseño de las libretas, pero es algo pendiente.
A medida que ha pasando el tiempo y he tomando
distancia de todo cuanto he podido experimentar con la creación de mis dibujos
y pinturas, puedo dar fe… de que todo cuanto leí en un pequeño artículo en el que hablaban de los mandalas y sus
beneficios a la hora de trabajar con ellos, es cierto. Os adjunto el escrito
por si alguien no sabe aún lo que es un mandala y que puedes descubrir con
ellos.
Según la
Psicología, el mandala representa al ser humano. Interactuar con ellos te ayuda
a curar la fragmentación psíquica y espiritual, a manifestar tu creatividad y a
reconectarte con tu ser esencial. Es como comenzar un viaje hacia tu esencia,
te abre puertas hasta ahora desconocidas y hace que brote tu sabiduría interior.
Integrarlas a tu vida te dará centro y la sensación de calma en medio de las
tormentas. Si crees que necesitas ayuda para exteriorizar tus emociones, puedes
colorearlas de adentro hacia fuera; si por el contrario,
quieres buscar tu centro, píntalas de afuera hacia adentro.
Carl Jung.
2 comentarios:
En mi blog tengo una cosita para ti que espero te guste :D
http://chicodelscrap.blogspot.com.es/2013/11/alegria-y-albooroto-otro-perrito-piloto.html
Hola Montse te he nominado a un premio Liebster Awards, el cual se le otorga a los blogs que tienen menos de 200 seguidores para así ayudarlos a darse a conocer. Te dejo la entrada http://scrapbookdreams-jerlin.blogspot.com/ para que veas la nominación y sigas los pasos para obtener el premio, eres libre de seguir mi blog y dejo a tu elección contestar las 11 preguntas establecidas o 11 cosas referentes a ti.
Felicidades
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